FORMAMOS DECENAS

En la entrada anterior os he contado la primera parte de la sesión de lógico-matemática de esta semana. En ella os contaba que les dije a los niños/as que vamos a aprender algunos trucos para que sea más fácil contar cuando tenemos muchas cosas. Lo primero que hicimos fue pensar qué hacer para contar si tenemos los objetos colocados de diferentes maneras: en fila, en círculo, en líneas que se cruzan... (pincha AQUÍ para ver la entrada).

Lo que hicimos a continuación fue sacar un nuevo material: unos palos de madera de colores ("nos los han traído de China" les dije, y les hizo mucha gracia, jeje). En el método ABN para contar se usan mucho los palillos, pero a mí aún me da miedo usarlos porque se rompen fácilmente, se pueden pinchar, se los meten a la boca... Así que he comprado otras dos opciones: palos tipo polo pero de goma eva (que también se rompen, pero son blanditos), y estos palos de madera (que no se rompen ni pinchan). Si a alguien le interesa que me pregunte, son de aliexpress y muy baratos.

Puse en la colchoneta un montón de palos. ¿Cuántos hay? "Tenemos que contarlos". ¿Cómo lo hacemos? "Ponlos en fila", me dijeron. Pero son muchos, y como rulan se mueven... es difícil. "Pues cuenta mientras los separas" me dijeron. Eso hice: conté separando de uno en uno todos los palos del montón... ¡sesenta y tres!. ¿Es fácil o difícil? les pregunté. "Es muy difícil, no sabemos contar tanto". Y ahora que los hemos contado, ¿sabéis cómo se escribe el sesenta y tres? "No seño, no sabemos tantos números". Les dije que no se preocuparan, porque íbamos a aprender un truco para hacerlo. Y es un truco que sí saben hacer: contar hasta 10. "¡Eso sí sabemos, seño!" me dijeron. Pues eso es lo que vamos a hacer: contar palos de 10 en 10 y cada vez que tengamos 10 palos, los atamos con una gomita. Y cada vez que tengamos un paquetito de 10 lo vamos a llamar DECENA.

Fuimos contando los palos de antes y cada vez que teníamos 10, mientras yo los ataba con una goma, ellos decían "¡otra decena!". Así hasta que sólo quedaban 3 palos, y como no llegan a 10, no podemos atarlos.

Este fue el resultado: con los palos que teníamos hicimos
6 paquetes de 10 (6 decenas) y nos quedaron 3 sueltos.

¿Cuántas decenas hemos formado? 6. ¿Y cuántos han quedado sueltos? 3. Pues... así se escribe el número sesenta y tres que nos había salido al contar al principio: 63.

Hacemos paquetes de 10 en 10, contamos los paquetes por un lado,
los sueltos por otro... ¡y ya está!

¿Queréis probar vosotros a formar decenas, haciendo paquetes de 10? "¡¡¡Sí!!!" Y eso hicimos: un equipo se puso a un lado de la colchoneta, y otro equipo al otro lado. A unos les di una caja llena de palos y gomas, y al otro una caja con tapones y bolsas de plástico para meterlas. En ambos casos, tenían que contar hasta 10: contar 10 palos y atarlos con una goma, y contar 10 tapones y meterlos en una bolsa.

Lo más difícil de la actividad no fue contar hasta 10... ¡sino atar las gomas! A las niñas un poco menos, que tienen experiencia con las coletas... Ellos mismos dijeron que tenían que practicar mucho, porque les costó muchísimo trabajo atarlas.

Con esta sesión, hemos creado la expectativa de que vean lo que pueden ser capaces de hacer, y las ganas de aprender a formar paquetes de 10 (o decenas, como ya los han empezado a llamar) para así poder hacer números difíciles. Pero de momento, nos quedamos con la práctica de formar decenas... lo de los números grandes era sólo un ejemplo.

Así que, os animo a practicar en casa esta nueva actividad: contar hasta 10, y hacer paquetes. Cualquier material es válido: tapones o botones en bolsas de plástico, palillos o pajitas con gomas elásticas o coletas... Esta segunda opción además es muy buena para el desarrollo de motricidad fina, pues ya os digo que les resulta casi imposible.